(15 de diciembre) - Ofilio Castro tronó en el momento cumbre, los hermanos Bucardo salvaron la noche con relevos espectaculares, Gustavo Martínez lanzó puros ceros e Ismael Munguía fue quien prendió la mecha para que Nicaragua venciera 2-1 a Panamá, ante más de 15 mil aficionados que llenaron por completo el Estadio Nacional Dennis Martínez.

Boletín de la jornada #4

El final fue sufrido, con Panamá presionando con tres hits consecutivos que los acercó en el marcador, presionando intensamente. No obstante, con un out y corredores en la tercera y la primera base, el mayor de los Bucardo, Wilber, entró para dominar al cuarto bate Ibrahím McKenzie en una fuerte rola al campo corto, que con las prodigiosas manos de Iván Marín, se convirtió en un doble play salvador.

El Bucardo menor, Jorge, había entrado en el séptimo con dos en base sin out y ganando Nicaragua 1-0, y dominó al mismo McKenzie, antes de Adolfo Reina diera una rola para doble matanza.

El picheo nicaragüense fue de altos kilates. El abridor Gustavo Martínez caminó seis entradas sin carrera y cuando flaqueó en el séptimo, tuvo ayuda. Jorge Bucardo siguió con dos ceros y Armando Ruiz intentó completar la lechada, pero tras ponchar a Félix Arosemena, Edgar Muñoz, Eduardo Thomas y Gerald Chin le pegaron hits consecutivos que enredaron el juego. Sin embargo, Wilber estaba listo por cualquier parpadeo y logró el salvamento del oro.

El bateo nica que había estado tronando en todo el torneo,  fue silenciado por Abraham Atencio Jr., un chavalo de 20 años, hijo de un viejo verdugo pinolero que solo permitió tres hits y una carrera en siete entradas.

Esa anotación fue por la combinación de Munguía y Ofilio. El chinandegano pegó un doblete en el tercero y tras boleto a Darrell Campbell, Ofilio siguió con un doble por el izquierdo para abrir la pizarra.

Fue hasta que salió Atencio que Nicaragua volvió a anotar. En el octavo, Munguía pegó otro doble, ahora contra Jean Corpas, y con dos outs, Ofilio volvió a ser oportuno con un sencillo remolcador de la segunda carrera, la que resultó decisiva.

Ofilio  se está encargando de poner a nuestro favor la intensa historia beisbolera entre Nicaragua y Panamá, al decidir el partido por la medalla de oro de los Juegos Centroamericanos del 2013 y aparecer de nuevo con dos batazos claves.

Gerald Hernández